El olfato en los gatos

en domingo, abril 23, 2006

23 abril 2006



MVZ Cecilia Vignau Ruiz

Los gatos huelen todo, antes de acercarse a alguien o dejar que los toquen, antes de comer, en fin, en todo momento están registrando los aromas que los rodean. Sin duda es uno de sus sentidos más importantes y desarrollados en el gato, incluso el olfato y el gusto, ambos estrechamente relacionados, interfieren en su comportamiento sexual y de agresión.
Tanto el sentido del gusto como el del olfato están más desarrollados en el gato que en otros mamíferos y constituyen los llamados sentidos químicos porque los receptores de la lengua y la nariz son los responsables de enviar al cerebro información relativa a la naturaleza química de las sustancias percibidas, esto permite identificarlas.
Los gatos tienen un tercer sentido químico que involucra al olfato y al gusto, tiene su propio receptor en la boca y se le conoce como órgano vomeronasal o de Jacobson. Este órgano ha sido localizado también en otras especies como ciervos y caballos, nosotros carecemos de él.
El órgano vomeronasal es estimulado cuando el animal percibe ciertas moléculas en el aire, éstas son retenidas por los receptores de la lengua y pasan a la abertura del órgano de Jacobson cuando el gato oprime la lengua contra el paladar. Seguramente has visto alguna vez a tu gato con cara de tonto después de olfatear algo o has visto a los caballos cuando parece que se están riendo, a esta acción se le denomina signo de Flehmen y se observa usualmente en los machos cuando anda por ahí una hembra en celo y es que el olfato es capaz de captar y atrapar el olor de las hormonas sexuales o feromonas.


¿CÓMO IDENTIFICAN LOS OLORES?
Las proteínas que contiene la carne, alimento favorito de los gatos, están compuestas por aminoácidos que a su vez contienen nitrógeno y azufre; estudios científicos han demostrado que son estos elementos los que estimulan los receptores gustativos del gato, mientras que la grasa de la carne estimula el sentido del olfato. Debido a su composición, la carne de diferentes especies tiene un olor distinto, cosa que los gatos no pasan por alto, esto explica su preferencia o aversión hacia determinados alimentos.
Esta característica es muy relevante en los felinos porque cuando las vías respiratorias están obstruidas o atrofiadas por alguna infección, o bien porque simplemente con la edad el sentido del olfato tiende a perderse, el animal tiene pérdida del apetito, la conducta sexual, el marcaje territorial e incluso la cacería son alterados también.
Nuestros poco desarrollados sentidos del gusto y del olfato en comparación con los de los gatos, nos ponen en desventaja, somos incapaces de apreciar la sutileza de las experiencias sociales y gastronómicas como lo hacen ellos. Seres tan refinados y sobrios ¿no crees?.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

genial, genial,, los gatos son perfectos..



lviji

Libitum Delicti dijo...

Exelente noticia!!